Un pequeño mar
Marinos
A los hombres, el mar nos ha
atacado
de distinta forma:
a unos los arroja desde la cubierta
de un barco en medio de una
tempestad;
a otros, heroicos, los obliga a
perderse en sus olas.
Unos, menos recordados, se han confundido
ante el rastro de una sirena de
canto alado.
Los marinos como yo
nos hemos extraviado en el
pequeño mar
de unos ojos
como los de Mediha.
Las olas me han hundido
como a muchos, su música secreta,
sus sílabas no me dejaron en
tierra…
Su mar me hace llevar a flote
un cuerpo inerte;
mi cuerpo devorado nunca será
igual.
Olvidé de dónde partí
las primeras horas:
sólo entiendo el lenguaje de la
sal,
su hondura sobre los peces:
cardumen.
En algún banco de coral
reposarán mis restos:
ella cerrará sus ojos
y habrá terminado mi historia.
No sin ella en este fondo.
El mar ha vencido
a un simple aprendiz.
Comentarios
Publicar un comentario